La rivalidad entre Christian Horner y Toto Wolff marcó una era de la Fórmula 1, con disputas constantes dentro y fuera de la pista. Todo cambió en julio, cuando el británico fue destituido de su cargo en Red Bull en una decisión que sacudió al paddock. Meses después, el director ejecutivo de Mercedes sorprendió al reconocer que extraña la presencia de su histórico némesis en la «Máxima».
En una entrevista exclusiva con Formula.hu, Wolff destacó la exitosa trayectoria de Horner, artífice de seis Campeonatos de Constructores y ocho de Pilotos en dos décadas al frente de Red Bull. Lamentó su salida, calificó su partida como la pérdida de «una auténtica figura del deporte» y remarcó que cada vez quedan menos «dinosaurios» en la cúpula de la Fórmula 1.
«Se ha comportado como un imbécil con bastante frecuencia en los últimos 12 a 15 años. Actúa con valores completamente diferentes a los míos, pero hasta el peor enemigo tiene un mejor amigo. Por otro lado, es una persona muy exitosa en lo que hace. Ahora que se ha ido, al menos por un tiempo, una auténtica figura ha abandonado el deporte», comentó Wolff.
«Era controvertido y divisivo, pero fue una de las figuras clave aquí. Podemos decir con seguridad que fue tan relevante como algunos de los pilotos. Desde una perspectiva puramente de la F1, no creo que queden muchos ‘dinosaurios’ con ese viejo estilo por aquí. Quizás solo yo. Quizás Frédéric Vasseur también sea un ‘dinosaurio’», continuó.
La rivalidad entre Wolff y Horner alcanzó su punto máximo en 2021, cuando Max Verstappen y Lewis Hamilton pelearon el título hasta la última curva en Abu Dhabi. El jefe de Mercedes recordó aquel campeonato y bromeó que ahora deberá buscar a alguien más a quien «odiar» en el paddock.
«Esos años, pero especialmente 2021, no fueron solo de Max y Lewis, sino también de Christian y de mí. Es más, a veces fue muy difícil, y eso está en los libros de historia y ahí seguirá. Siempre decía que me encantaba odiarlo. Así que, ¿a quién voy a odiar ahora? Parece que tendré que encontrar a alguien más», concluyó el austríaco.
