Ya es evidente que Isack Hadjar es el mejor novato hasta ahora en la temporada, sin quitarle mérito a la labor de Andrea Kimi Antonelli con Mercedes. Quedó en el pasado aquella colisión del joven piloto francés en la vuelta de formación del Gran Premio inaugural en Australia. Las lágrimas se convirtieron en puntos.
Hadjar arrancó el sábado pasado con dos incidentes en la segunda práctica libre, pero poco parecieron influenciarlo en su performance durante la clasificación para el Gran Premio de Mónaco. Registró un tiempo de 1:10.923 que lo depositó en la quinta posición de largada, después de la sanción a Lewis Hamilton (Ferrari) por bloquear a Max Verstappen (Red Bull) en el primer tramo clasificatorio.
También es destacable lo realizado por Liam Lawson, quien sorprendió al ubicarse en la novena plaza de salida, por sobre los Williams y el otro Red Bull, de Yuki Tsunoda…
La nueva normativa que obligaba a los pilotos a realizar dos detenciones en boxes para cambiar neumáticos abría la posibilidad a una amplia gama de tácticas a las que los equipos podrían recurrir durante la carrera. Sin embargo, eso no fue un problema para Racing Bulls, que realizó una fantástica estrategia en conjunto.
Su excelente actuación en la clasificación le fue recompensada, Hadjar logró aprovechar la ayuda de su compañero de equipo para realizar sus dos detenciones en boxes con antelación y mantenerse en la sexta posición hasta el final de la carrera. Con dicho resultado, el joven francés entró dentro del top-10 del Campeonato de Pilotos con sus 15 puntos y desplazó a Lance Stroll (Aston Martin) al onceavo lugar.
Por su parte, Lawson dejó atrás su complicado paso como piloto titular de Red Bull y registró sus primeros cuatro puntos de la campaña después de finalizar en el octavo puesto. La defensa del neozelandés al montar neumáticos blandos retuvo a los pilotos que venían detrás y jugó un papel importante para que Racing Bulls logre cumplir su cometido: Hadjar completó su segunda parada en boxes y ello depositó a los dos novatos dentro de las primeras diez posiciones, quienes además lograron sus mejores resultados de sus carreras.
Tsunoda tuvo un flojo desempeño y terminó 17°, mientras que Verstappen apostó todo a una bandera roja que nunca salió y que le hizo perder su momentáneo liderazgo en el cierre de la carrera al verse forzado a detenerse en boxes en la última vuelta. El piloto neerlandés cruzó la bandera a cuadros en la cuarta posición y sumó 12 puntos: la misma cantidad que logró su equipo satélite, Racing Bulls, en conjunto con Hadjar y Lawson.
