Flavio Briatore, director ejecutivo de Alpine, analizó el rendimiento del equipo en el Gran Premio de Emilia Romagna, que marcó el regreso de Franco Colapinto como piloto titular en la Fórmula 1.
Alpine llegó a Imola con el objetivo de sumar puntos, pero se fue con las manos vacías. Tras finalizar en la sexta y tercera posición en las prácticas libres del viernes, Pierre Gasly accedió al tercer tramo de clasificación el sábado y largó décimo en la carrera del domingo.
El piloto francés se posicionaba como un candidato para sumar puntos después de un positivo fin de semana, mientras que su flamante compañero Franco Colapinto, tenía la tarea de adaptarse al A525. Sin embargo, las chances se esfumaron con una salida de pista de Gasly en la tercera vuelta cuando peleaba por defender su noveno lugar contra Charles Leclerc (Ferrari).
Por su parte, Colapinto partió desde la decimosexta posición y tuvo un gran primer stint. Gestionó sus neumáticos medios por 22 vueltas hasta su ingreso a boxes, que montó el compuesto duro, pero el ingreso de Virtual Safety Car (VSC) por el retiro del Haas de Esteban Ocon complicó la carrera del piloto argentino, que no pudo explotar su buena estrategia inicial de carrera.
«Estábamos encaminados a un buen resultado hoy y teníamos chances de sumar puntos antes del Virtual Safety Car», declaró Briatore.
«Especialmente con Franco, planeábamos una estrategia a una parada hasta el final, pero con la neutralización del pelotón, los pilotos de adelante tuvieron una gran chance realizar paradas en los boxes sin afectar sus posiciones. Son cosas que pasan en las carreras, y la clasificación final no refleja dónde podríamos haber terminado hoy», lamentó el director ejecutivo de Alpine.
«Ahora vamos a Mónaco, uno de mis Grandes Premios de casa, y una pista donde volveremos a tener la oportunidad de competir», finalizó.
