El A525, un auto que atrasa medio año

El Alpine funciona mejor en clasificación que en carrera, pero, en esencia, es el mismo coche que terminó el campeonato anterior, sin suficientes desarrollos. ¿Se viene una gran novedad a corto plazo?

El balance de las tres primeras carreras de Franco Colapinto en el equipo Alpine-Renault es el que nadie esperaba: ni el piloto, ni sus fanáticos, ni tampoco el equipo. La velocidad innata que el argentino mostró en sus primeras carreras en 2024 no pudo haberse esfumado por arte de magia. Es evidente que su interacción con la nueva máquina no está lo suficientemente aceitada, o que el coche no se acomoda al estilo natural sobrevirante de Colapinto, como ocurría con el Williams.

El Alpine A525 parece tener potencial si se estudia con cuidado la performance de Pierre Gasly. El francés accedió a la última etapa de la clasificación (Q3) en cinco de los nueve Grands Prix disputados, es decir, entró en el Top-10 más veces de lo que no lo consiguió, y ello pese al acusado déficit de potencia (30 HP) del motor Renault.

Sin embargo, solo pudo sumar en tres carreras. Una conclusión simple sería decir que el A525 funciona mejor a una vuelta que en ritmo de carrera. Y es lo que parece aceptar el equipo de Enstone.

Algunos números: en la Q3 de Barcelona, el Alpine fue el quinto mejor coche, el primero detrás de los Cuatro Grandes (McLaren, RedBull, Ferrari, Mercedes), a casi 0s7 de la punta. Pero en el ritmo de carrera promedio acabó octavo, superado además por Racing Bulls, Aston Martin y la sorpresa de Sauber, con un ritmo (1s8 por vuelta) superior al de McLaren.

Las declaraciones de Gasly tras la carrera abonan la teoría, por más simplista que suene: “La clasificación estuvo muy bien, pero parece que sufrimos más los domingos”, señaló el piloto de Rouen.

Eso pone a Colapinto ante un desafío: rendir al extremo en la clasificación. Lo intentó en Imola con resultado negativo: golpe en la Q1. Fue conservador en Mónaco para evitar dar otro mal paso, pero se condenó para la carrera, largando en los últimos lugares. Y en Barcelona fue un problema mecánico el que le impidió defender sus chances de ascender a la Q2.

El problema mecánico en la caja de velocidades parece haber tenido un origen similar al ocurrido un día antes: una fuga hidráulica. Lo que habilita la pregunta: ¿Estaba bien preparado ese Alpine? ¿Se lo había repasado a fondo? En tren de indagación, podríamos preguntarnos si esa sangría de cerca de 300 empleados, de la que Flavio Briatore se vanagloria, no hizo mella en los niveles de calidad en la atención en pista.

Briatore regresó a Enstone hace cerca de un año: el arranque de 2024 había sido desastroso, con un coche pesado y falto de potencia. Un golpe de fortuna provocó que el español David Sánchez, salido de Ferrari, no se sintiera cómodo en su nuevo destino, McLaren, y abandonara la escuadra tras un par de meses para recalar en Alpine. Fue Sánchez el que pergeñó el múltiple upgrade técnico que transformó el A524 en las últimas carreras del año, lo que le permitió a la escuadra saltar del noveno al sexto lugar en el torneo de Constructores.

Pero todo indica que Sánchez y el equipo técnico de Alpine no pudieron ejecutar tan pronto una segunda etapa de adelanto técnico como para que el A525 fuera otro paso adelante. Esencialmente, entonces, todo parece sugerir que lo que Alpine pone en pista en 2025 es una versión apenas superada del A524. A Barcelona llevaron apenas unas modificaciones en el piso del auto, para ganar un poco más de carga local, pero nada revolucionario.

Cuando Colapinto firmó su contrato en diciembre del año pasado, Alpine había pegado un gran salto de calidad relativa. Pero desde entonces, el resto de los equipos avanzaron en una progresión lógica, y el equipo de Enstone quedó desfasado. Un coche con medio año de atraso. Lo bueno de eso es que, a corto o mediano plazo, debiera llegar un upgrade especial. ¿Llegará a tiempo?

En la Q1 de Barcelona, Colapinto quedó a menos de tres décimas de Gasly sin poder efectuar una segunda salida. Aquí y allá hay indicios de que, en condiciones normales, el argentino puede acercarse mucho al rendimiento del francés. Eso es importante, dada la continuidad de Gasly sobre este auto, que lleva entonces casi una temporada completa (y no las nueve carreras de 2025, como el resto de las máquinas) compitiendo.

Colapinto acepta que aún tiene rendimiento que exprimir en condiciones de clasificación (cubiertas nuevas, poco combustible), pero que después de tres carreras no haya brindado un claro salto de performance para el equipo respecto a lo que produjo Jack Doohan en los cinco primeros Grands Prix de 2025 no es muy halagüeño. Sobre todo, porque nadie sabe realmente qué está escrito en la agenda secreta de Briatore.

Las posiciones de la tabla de Constructores no siempre son el reflejo fiel de las cualidades técnicas de un coche, basta recordar lo que ocurrió con el RedBull RB20 en 2024, pero que Alpine esté último en la tabla actual sugiere que su atraso impacta en el resultado.