Por estas horas, en los medios periodísticos de todo el mundo, es hora de balances en cuanto a la temporada recién finalizada de la Fórmula 1. Nuevamente volverá a hablarse de los mejores, los más campeones, los ganadores, las frustraciones y los pronósticos para 2026. Nosotros esta vez nos ocuparemos de los debutantes, de cómo ha sido la injerencia de los mismos en las grillas a lo largo de los años. En 2025, sólo hubo tres novatos (Gabriel Bortoleto y Kimi Antonelli, quienes lo hicieron en Australia, e Isack Hadjar, que debutó una semana después, en China). Y si bien no terminaron el año los mismos 20 pilotos que lo comenzaron, ningún competidor nuevo se presentó en el resto del ejercicio, ya que aunque Franco Colapinto reemplazó a Jack Doohan en Alpine, el argentino había debutado en el torneo anterior.
Justamente en 2024, también hubo tres competidores nuevos (Oliver Bearman en Arabia, el propio Franco desde el GP italiano y Doohan, que corrió sólo la fecha final en Abu Dhabi). La misma cifra también se dio en 2023, con Logan Sargeant, Oscar Piastri y Liam Lawson, y en 2021, con Yuki Tsunoda, Mick Schumacher y Nikita Mazepin. En el medio quedó el certamen de 2022, menos prolífico que todos los mencionados y con solamente dos jóvenes que largaron su primer GP: Guanyu Zhou y Nyck De Vries. No obstante, para remontarnos al último año en el que la veintena de competidores que arrancó la temporada fue la misma que lo terminó (sin cambios de equipos en el medio ni bajas voluntarias o forzadas) hay que viajar a 2018. Ese campeonato es hasta hoy el único de la historia en el que no se produjo ni un solo cambio o modificación transitoria de butacas, ni una baja temporal o forzada: los 20 protagonistas que arrancaron en Melbourne participaron de las 21 carreras y fueron los mismos que bajaron el telón en Abu Dhabi. Nunca antes ni después se dio una situación similar. En 2019, por ejemplo, no hubo modificaciones en la plantilla, pero sí en las escuadras: promediando el torneo hubo un enroque entre Pierre Gasly y Alex Albon, cuando el francés pasó de Red Bull a Toro Rosso y el tailandés realizó el camino opuesto.
Como dato extra, para entender lo que significaba la constante alternancia de pilotos en los primeros tiempos de la categoría, es fundamental recordar algo: recién en el Gran Premio de Francia de 1953, la 28ª exigencia puntuable desde el comienzo de todo (Gran Bretaña 1950), no hubo ningún debutante en la grilla de partida, tal como había acontecido en las 27 pruebas precedentes. Ese 5/7/53, los veinticinco intrépidos que salieron a desafiar al difícil circuito de Reims, ya tenían al menos la experiencia de una carrera largada en su “foja de servicios”. Hechos y diferencias que se suceden y albergan dos épocas bien distintas. El último testimonio lo brindan las cifras. En la década del ’50 debutaron 299 pilotos; en la del ’60, 127; en la del ’70, 119, y en la del ’80, 70 competidores. La curva en baja no se detuvo, ya que en los ’90, hubo 59 corredores nuevos; en la década del 2000, 49, y en la del ’10, apenas 41, a la vez que entre 2020 -año de la pandemia- y la temporada que terminó el último domingo (seis años), tan sólo debutaron 17 jóvenes. Y nada indica que la tendencia descendente se estabilice en breve.





