El Gran Premio de Singapur es una de las carreras más exigentes físicamente del campeonato de Fórmula 1, debido a las sofocantes condiciones de calor y humedad. Este año es la primera vez que la FIA declara de manera oficial el «Riesgo por Calor». Esto se debe a que la temperatura ambiente alcanzará los 31°C el día sábado y domingo.
El director de carrera, Rui Marques, notificó a los equipos el día jueves sobre esta medida de seguridad. «De acuerdo con el Artículo 26.19 del Reglamento Deportivo, y habiéndose recibido un pronóstico del Servicio Meteorológico Oficial que predice que el Índice de Calor superará los 31,0 °C en algún momento durante la carrera de este evento, se declara un Riesgo por Calor.», declaró en un documento emitido por la FIA.
Los equipos tienen dos alternativas: la primera es que sus pilotos utilicen los chalecos refrigerantes; la segunda, que los monoplazas incorporen un peso extra para quedar equilibrado con los otros equipos. En este sentido, el reglamento deja decidir de manera libre. Ahora bien, en caso de utilizar los chalecos, el coche debe estar equipado con los materiales necesarios para que estos funcionen.
En caso de que un piloto no quiera utilizar el chaleco refrigerante, se deberá sumar 0,5 kg de lastre, según lo estipulado en la reglamentación. «La diferencia de masa entre el equipamiento personal normalmente usado por el piloto y cualquier elemento del equipamiento personal que forme parte del sistema deberá ser compensada mediante la colocación de 0,5 kg de lastre en el habitáculo», explica el artículo.
La FIA optó por flexibilizar esta normativa y dar la opción de no usarlos, ya que varios pilotos, en las pruebas de los chalecos, se quejaron por la incomodidad y falta de espacio que generaban. Esta medida busca evitar cualquier ventaja para quienes no quieran usar el sistema. De esta manera, los monoplazas pesarán lo mismo utilizando o no el chaleco refrigerante.