Hamilton y Leclerc, en el equipo de Maranello, y Norris y Piastri, en la escudería británica, van por el mismo objetivo de ser campeón y esto preanuncia atractivos enfrentamientos.
Tan o más interesante que especular individualmente con las chances de los principales candidatos al título es teorizar sobre ásperas luchas entre compañeros de similar nivel en las escuderías que asoman como dominadoras. Un tema siempre atractivo, que incluso alienta el morbo de los aficionados. A casi 40 años, todavía se recuerda el enfrentamiento Prost-Senna sobre los por entonces dominadores de McLaren. Es el ejemplo emblemático, aunque no es el único en la historia de la Fórmula 1.
Un repaso a la definida grilla que la Fórmula 1 armará desde el cada vez más cercano Gran Premio de Australia, encuentra en Ferrari y McLaren los terrenos más propicios para esta lucha interna. Dos equipos con necesidad de ser campeones luego de varios años de abstinencia, con tres pilotos (Leclerc, Norris y Piastri) con el deseo de alcanzar su primera corona, y un cuarto, como Hamilton, impulsado por la ambición especial de entrar, con su octavo título, en la historia como el máximo rey de la Máxima. Y encima en su primer año con Ferrari. De película.
“No tengo esposa, ni tengo hijos, si, tengo hambre competitiva y sólo quiero una cosa: ser otra vez campeón mundial”, largó Lewis como un fuerte mensaje desafiante a Leclerc. Con 40 años y a punto de iniciar su 19na temporada en el Campeonato Mundial de Fórmula 1, Lewis sabe que Ferrari es el último tren en el camino a ser más campeón que nadie. No la tiene fácil con un piloto veloz como el monegasco, siempre protagonista, pero sin la experiencia de llegar a las últimas carreras con chances al título. A su favor, tiene el mayor conocimiento del especial Mundo Ferrari, repleto de presiones e intrigas. Esta es una materia que debe rendir Lewis, quien por las dudas ya llevó parte de sus asistentes. Igual todo depende de cómo funcione la Ferrari. Si lo hace como mostró en las pruebas de pretemporada, tendremos una interesante lucha. A efectos del mayor efecto marquetinero que tanto le gusta a los responsables Liberty Media, “pagaría” más un protagonismo central de Lewis. Se verá o no, con los hechos.
McLaren muestra otro panorama. Norris y Piastri compartirán la tercera temporada juntos sobre el auto que en las estimaciones, esas que a veces se cumplen y otras no, asoma como el favorito. Por antigüedad y experiencia, el inglés se perfila como el número 1, aunque por lo hecho en el 2024, Piastri demostró que puede discutirle ese privilegio en una lucha interna que como todas puede complicar el objetivo común que solapadamente es coronar a Lando. Esto lo advierte nada menos que Mark Webber, el expiloto, compatriota y responsable como apoderado de la llegada de Piastri a McLaren, esquivando un contrato previo que tenía con Alpine. “Si McLaren quiere salir campeón debe darle prioridad a Norris, de lo contrario, Piastri le sacará puntos importantes…», aconseja Webber. Un extraño paño frío que si se aplica atenuará la intensidad de un duelo que, de ser libre, promete ser interesante y por supuesto más justo.
