Durante la rueda de prensa de jefes de equipo en Las Vegas, Nikolas Tombazis explicó que uno de los pilares del histórico cambio reglamentario que entrará en vigor en 2026 será la reducción del aire sucio generado por los coches. El director de monoplazas de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) aseguró que dicho avance debería ofrecer carreras «más emocionantes» y permitir que los pilotos sigan de cerca a sus rivales.
El nuevo Reglamento Deportivo también alcanzará a las unidades de potencia, que elevarán la participación eléctrica hasta el 50% y utilizarán combustible 100% sostenible. En paralelo, los monoplazas adoptarán un asistente de adelantamiento en lugar del DRS, recuperarán la aerodinámica activa y dejarán atrás el efecto suelo, en lo que constituye la mayor transformación técnica de las últimas décadas.

Hace años que los pilotos reclaman mejores condiciones para adelantar en pista, en una Fórmula 1 que se acerca al final de su normativa vigente. De acuerdo con Tombazis, dicha problemática se resolverá en 2026, cuando el nuevo reglamento técnico reduzca el aire sucio y permita que los monoplazas que vienen por detrás se acerquen con mayor facilidad a sus rivales.
«Con las nuevas regulaciones, es evidente que inicialmente se espera una diferencia un poco mayor entre los autos en la parrilla, pero esperamos, desde el punto de vista aerodinámico, que los coches puedan seguir unos a otros mucho más de cerca que ahora», comenzó el director de monoplazas de la FIA.

«Las características del flujo de aire mejoraron mucho y creemos que aprendimos mucho de los autos de 2022 para aplicar esas lecciones a la normativa aerodinámica de este año. La transición del uso del DRS a la energía como herramienta para facilitar los adelantamientos… Todo ello cambiará la dinámica y la hará más impredecible. Esto, junto con la diferente aerodinámica, creo que hará que las carreras sean, en definitiva, más emocionantes», continuó.
Tombazis también señaló que la brecha con respecto a los monoplazas actuales será considerable, debido a que los equipos recuperaron mucho downforce desde la implementación del reglamento en 2022. En paralelo, el efecto del aire sucio se agravó de forma continua. Queda pendiente ver cuál será el verdadero impacto del nuevo reglamento deportivo, señalado como uno de los cambios más profundos en la historia de la Fórmula 1.





