Primero fue Lewis Hamilton que golpeó las defensas externas de la curva 7. Sin problemas, el inglés salió del auto sabiendo que no podría marcar tiempos y con un 10º lugar asegurado, provocando una bandera roja. «Todos trabajaron muy duro para armar este auto, y nunca me gusta dañarlo. Y creo que estábamos luchando por los tres primeros. Acabo de perder la parte trasera en la curva 7 y eso fue todo. No tengo una respuesta«, se excusó el heptacampeón.
Al reanudarse, sorprendió que su compañero George Russell, quien fue protagonista en la doble variante de ingreso a la recta principal. Éste último perdió el control de su Mercedes en el ingreso y se despistó contra las protecciones de neumáticos golpeando marcha atrás, situación que fue «afortunado» para el box. «Lo siento por el equipo y los muchachos en el garaje. Me siento bien físicamente, espero que el auto esté bien. Normalmente tenemos un mejor ritmo de carrera y definitivamente estamos allí en la pelea, así que tal vez estemos en un buen lugar«, admitió Russell .
Por su parte, Toto Wolff, director de la escuadra de Brickley, se mostró sorprendido sobre la reacción de parte del público ante el despiste de Hamilton. «Creo que necesitamos educar a los aficionados de forma colectiva junto a la Fórmula 1 y también con los medios de comunicación, y con aquellos que están celebrando que un coche ha tenido un accidente. No es lo que haríamos con nuestros rivales o enemigos, aunque se puede pensar que tendríamos cierta animosidad por ahí«, expresó.
En tanto, los mecánicos trabajan en reparar ambas unidades y dejarlas listas para poder salir a pista este sábado y disputar la Carrera Sprint en la pista austríaca a partir de la hora 11.30 de Argentina.