¿CUÁNTO VALE TENER UN MOTOR FRESCO?

McLaren quiere que la FIA investigue el costo de la unidad de potencia flamante que Honda puso en el Red Bull de Max Verstappen para el GP de Brasil. Más allá del dinero, se puede calibrar la ganancia en performance.

La unidad de potencia fresca que Max Verstappen utilizó para largar desde la calle de boxes en Interlagos y llegar tercero en el Grand Prix de Brasil ya está envuelta en la polémica. McLaren asegura que cambiar un motor que no haya fallado puede significar una transgresión al tope presupuestario, y le reclama a la FIA una respuesta. Pero, más allá de esa discusión, al aficionado le interesa saber cuál es la ganancia real en performance al disponer de un motor fresco.

“Estos motores no presentan mucha degradación con el kilometraje”, señaló Andrea Stella, el Team Principal de McLaren. “Por eso, en general, no se suele cambiar un motor a costa de una penalización o una pérdida de posiciones, ya que normalmente el rendimiento recuperado no compensa dichas pérdidas”. Stella dio a entender que no planea un cambio de motor para ninguno de sus pilotos en los tres Grands Prix que restan.

Su colega en Red Bull, Laurent Mekies, aceptó que no era un plan el cambio del motor, que solo se realizó dada la desastrosa performance en la clasificación. “Pero siempre es bueno instalar un motor nuevo”, acotó. “Es justo decir que, en la recta final de la temporada, estábamos en camino de terminar el año sin necesidad del cambio. Simplemente sentimos que debíamos aprovechar la oportunidad, principalmente porque queríamos cambiar el coche”.

Frente al mito de que un motor fresco supone una ganancia de una décima y media de segundo, Mekies entiende que “es difícil dar una cifra, pero las diferencias entre los autos son lo suficientemente pequeñas como para que todo sea importante”.Un rápido cálculo: en la vuelta 10, Verstappen estaba 14s877 detrás de Lando Norris; la bandera a cuadros (vuelta 71) lo sorprendió a 10s750 del vencedor. En 61 vueltas de bandera verde, sin neutralizaciones, el campeón redujo 4s127 la diferencia, lo que supone un ritmo de vuelta 0s067 más veloz por vuelta.

Sesenta y siete milésimas. Hay una ventaja, pero en ella están involucradas todas las diferencias de puesta a punto en el Red Bull de Verstappen de sábado para domingo, que incluyeron variantes aerodinámicas.

Sin embargo, al cotejar las velocidades finales de clasificación y carrera, queda clara la ventaja que supuso el nuevo motor. Verstappen fue quien señaló la velocidad punta más alta, 346 km/h, de manera repetida, lo que supuso un avance de 8 km/h respecto a la clasificación, como marca el siguiente gráfico:Es cierto que esa velocidad es producto del motor y de la potencia del DRS. Pero Oscar Piastri, que también usó a menudo ese dispositivo, sólo ganó 3 km/h.

La comparación más directa es con el otro motor Honda del equipo: Yuki Tsunoda, el segundo piloto de Red Bull, solo ganó 2 km/h (de 338 a 340 km/h) de clasificación a carrera, utilizando la misma unidad de potencia. Un cálculo conservador indica que, al menos, el motor nuevo significó una ganancia de 6 km/h.

En condiciones de carrera, los tiempos de vuelta no se acercan a los de clasificación; aun siendo el más veloz del Grand Prix, la mejor de vuelta de Verstappen fue 1m12s447, dos segundos más lento que su pobre 1m10s403 de clasificación, por razones obvias; de esa manera es difícil determinar si la décima y media del mito es real.

Pero al campeón le ha quedado en el coche una fresca unidad de potencia, que puede seguir ganando ventajas en circuitos veloces como Las Vegas (241 km/h de promedio) o Qatar (242 km/h), las dos carreras que vienen.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *