Una de las claves del GP de Mónaco de F1 de 2025 era la nueva normativa de la FIA de obligar a dos paradas con el objetivo de hacer más incierto y emocionante el desarrollo de la carrera, que tradicionalmente se convierte en una procesión en donde es prácticamente imposible adelantar.
Lamentablemente, el resultado de la carrera ha demostrado que la normativa ha sido un fracaso, pues además que la carrera ha vuelto a ser un monólogo de autos persiguiéndose sin ninguna posibilidad de adelantarse, hay que añadir que la carrera ha sido terriblemente lenta como causa de la estrategia que han desarrollado varios equipos, principalmente Williams y Racing Bulls, especialmente la primera, que incluso despertó la ira de Toto Wolff contra su colega de Williams James Vowles.
Desde el inicio de la carrera, estos equipos se organizaron perfectamente para conseguir aire limpio y espacio a la espalda de uno de los pilotos para efectuar la parada en boxes sin el riesgo de perder posición utilizando al otro piloto como stopper.
Esta táctica ha permitido a los dos pilotos, tanto de Williams como de Racing Bulls, acabar en el top 10. Analizando la comunicación vía radio, reconstruimos como se ha desarrollado la estrategia que inició Racing Bulls.
En la sexta vuelta, Lawson recibe este mensaje: «Empezamos el plan, gestionamos los neumáticos». El neozelandés responde afirmando que los autos de delante tampoco están gestionando, pero los estrategas del equipo insisten: «Debemos intentar hacer durar los neumáticos todavía más, como hemos planeado».
Lawson cumple con su cometido y Hadjar puede realizar la primera parada en la vuelta 14 manteniendo la posición delante del pelotón retrasado por el trabajo del neozelandés. Lawson pregunta si debe continuar con la estrategia y le confirman que sí. Sigue pues, con un ritmo muy lento, para garantizar a su compañero de equipo otra parada gratis. Es aquí donde Williams se da cuenta de la estrategia de sus rivales y empieza a cimentar su propia estrategia.
En la vuelta 27, Albon consulta a su box sugiriendo una táctica similar, replicando la estrategia del equipo de Faenza. Williams da vía libre a sus pilotos ya que están uno detrás del otro.
En la vuelta 25, se le pide a Sainz que gire en torno al minuto diecinueve segundos ralentizando a todos los autos que les siguen, ante la desesperación de Mercedes, que ve como se esfuman las posibilidades de puntuar. El punto final llega cuando los pilotos Williams intercambian posiciones para permitir al español una parada tranquila, para ceder poco después su posición a Albon. «Si trabajamos como equipo, acabamos en novena y décima posición», se oye por la radio este mensaje dirigido a Albon en la vuelta 42. Al final, éxito asegurado para estos dos equipos, enfado de Toto Wolff y fracaso del intento de la FIA de intentar dar más espectáculo en las calles de Mónaco.