La lluvia fue el gran desafio para los debutantes y novatos en el reciente Gran Premio de Australia, en el Albert Park de Melbourne. Las cambiantes condiciones de adherencia, con el caos sobrevenido por las salidas de pista y accidentes, enmarcaron un comienzo brutal para los debutantes Kimi Antonelli, Isack Hadjar y Gabriel Bortoleto. Pero tambien sufrieron a pesar de haber ya corrido en 2024, Jack Doohan, Liam Lawson y Oliver Bearman. Ninguno de ellos logró salir indemne de un fin de semana lleno de errores, rabia, desilusión, sensación de fracaso, pero también de aprendizaje y algunas chispas de un gran potencial.
Kimi Antonelli: Promesa a gran velocidad. Por resultado, el gran ganador entre los debutantes y novatos, cuarto. Había largado 16º, tras un incidente el sabado. Hizo un trompo a poco de comenzar la carrera pero, después, ayudado por la estrategia de Mercedes y los “safety cars”, remontó de forma espectacular. Su ritmo con neumáticos intermedios era el mismo que llevaba su compañero George Russell, que terminó en la tercera posición. Combatió con gran solvencia sobre ese piso mojado con ya encallecidos Nico Hulkenberg y Lance Stroll.
Jack Doohan: Muy pronto para juzgar. El titular de la butaca que anhela Franco Colapinto se estrelló al acelerar de más en la primera vuelta. Comprensible porque casi ninguno de los novatos tenía constancia de que habia curvas que no permitían usar ams del 20% de acelerador a la salida de las mismas, lo que suelen saber los más experimentados. Y de ellos también hubo claros errores, como el de Fernando Alonso y el de Carlos Sainz, que se dieron contra las vallas. Y tanto los tres primeros de la carrera también se salieron de pista aunque tuvieron la suerte o el tino de hacerlo donde habia zonas de escape. Jack se vio sorprendido por una rápida entrega de potencia. El sábado había sido más rápido que su compañero Pierre Gasly en la Q1 y copiado el ritmo en tandas largas el día viernes.
Flavio Briatore quien contrató a Colapinto, lo observará muy de cerca. Lo de Australia, no da para juzgar.
Oliver Bearman: Intimidado por sus dos accidentes. Para Bearman, el fin de semana fue una prueba de resistencia. No pudo preparar adecuadamente su coche. Por eso y porque no queria chocar de nuevo fue lento, pero terminó la carrera 14º y último. Por detrás de él, los accidentados, que fueron seis.
Gabriel Bortoleto: Desafiante con el compañero. El brasileño Bortoleto, en su Kick Sauber, sorprendió superando a un experimentado Nico Hulkenberg en la clasificación. Sin embargo, su carrera terminó abruptamente tras impactar violentamente contra un bordillo, romper la suspensión y hacer un trompo golpeando contra las vallas. Bortoleto, campeón de la F2 2024, dejó claro que tiene el talento necesario para mezclarse con la elite.
Isack Hadjar: Controlar sus emociones. El franco argelino de Racing Bulls, que tiende a ser muy agresivo Bulls, brilló durante las prácticas y la clasificación girando casi al nivel de su compañero Yuki Tsunoda. Sin embargo, al acelerar demasiado en la vuelta de formación se golpeó abandonando antes de largar. Se bajó llorando del auto. Su jefe de equipo le consoló al decirle que incluso pilotos experimentados como Carlos Sainz sufrieron suerte parecida bajo las mismas condiciones.
Liam Lawson: La presión se llama Max. Lawson, que ya había corrido 11 Grandes Premios, se enfrentó el reto más complicado de su vida. Compararse en su debut con Red Bull con su compañero tetracampeón, Max Verstappen.
Problemas con el turbo de su motor le quitaron una sesión de entrenamientos casi completa. Tenía una puesta a punto diferente a la de Max en un coche ya de por si nervioso y poco tolerante. Rápido por momentos pero inconsistente con pavimento seco, la lluvia lo desbordó.
Largando desde la calle de boxes, alcanzó a algunos rezagados. Pero no podía adelantar a pesar de la superioridad de su chasis, Lawson. Se quedó en pista con sus gomas medias lisas (banda amarilla) cuando todos entraron a montar de lluvia intermedia al comenzar el último chaparrón. Se fue de pista y chocó en la vuelta 47, abandonando. Dura tarea tiene porque el equipo, aunque no lo compare con Verstappen, le pedirá que al menos rinda a un nivel igual o mejor que el mexicano expulsado recientemente, Sergio Pérez.
Para aquellos que en su momento criticaron a Franco Colapinto por sus accidentes en Interlagos, lo sucedido en Albert Park, vuelve a demostrar que las carreras bajo lluvia intermitente son una verdadera lotería que, si bien sorprende más a novatos, también lo hace con los veteranos, caso Carlos Sainz y Fernando Alonso (accidentes) y salidas de pista con retorno (Lando Norris, Oscar Piastri, Max Verstappen).