¿Qué impacto mediático puede tener un triunfo de Lewis Hamilton en el Gran Premio de Japón? Muchísimo, a partir de ser tomado como el primero de inglés sobre una Ferrari.
Imaginables son los titulares de la prensa italiana sobre las renovadas expectativas que este triunfo supondría para el objetivo de Ferrari de consagrar un campeón mundial, algo que no consigue desde 2007 con Kimi Raikkonen. Ni que hablar del potenciamiento que tendrían las teorías sobre las posibilidades de Lewis de conquistar su octavo campeonato mundial y de esa manera desempatar con Michael Schumacher y convertirse en el máximo rey de la historia de la Fórmula 1.
Habrá que esperar para ver si se da semejante situación. Más cercano, concretamente en el Gran Premio del fin de semana, hay otro dato estadístico que une a Schumacher con Hamilton. Es la posibilidad que Lewis iguale la cantidad de 6 triunfos que Schumi tiene como máximo vencedor del Gran Premio de Japón.
Con 19 participaciones ya cerradas en la carrera nipona, Schumacher inició su serie en 1995 en su quinta presentación en la carrera. Fue la última de las 19 victorias obtenidas sobre el Benetton y ese 29 de octubre de 1995, Michael ya se había asegurado su segundo título mundial con otra victoria en el Gran Premio del Pacífico, disputado una semana antes también en tierras niponas en el circuito de Aida.
Las cabalgatas triunfales que a fines de los 90 y fundamentalmente a principios del siglo XX realizó Michael sobre distintas Ferrari, con el respaldo de sus ocasionales compañeros (Irvine y Barrichello), completaron la cadena. Los eslabones de triunfos se enhebraron en 1997, 2000, 2001, 2002 y 2004 para llegar a esa media docena que parecía inalcanzables hasta que surgió Hamilton.
El inglés no tardó en tomarle la mano al Gran Premio japones y festejó en 2007 en el año de su debut en la Fórmula 1. Fue con un McLaren en Fuji, el circuito que fugazmente reemplazó a Suzuka, que definitivamente retornó al calendario en 2009. Las nuevas victorias de Lewis debieron esperar un poco más y llegaron en 2014, 2015, 2017 y 2018, todas desde la butaca de Mercedes Benz, la misma que había heredado en 2013 con el retiro de Schumacher.
Con la obvia ausencia eterna de Schumacher, Hamilton tiene en el fin de semana la chance de igualar esa marca del alemán, y en el futuro superarla. Igual vale recordar que hace seis años que no gana en Japón y que Ferrari no ha tenido un buen inicio de temporada. Y a no dormirse porque con ganas de integrarse al grupo está Max Verstappen, vencedor de los últimos tres Grandes Premio de Japón. Y si bien al rendimiento del Red Bull, dista de ser el de años anterior, no es para descartarlo y menos si hay lluvia.