Franco Colapinto y Alpine: ¿Talento en el lugar equivocado?

Del brillo en Williams al desconcierto en Alpine: el contexto desfavorable pone a prueba la resiliencia y el futuro de Franco Colapinto en la máxima categoría del automovilismo.

Juan Manuel Fangio no solo fue célebre por sus cinco campeonatos mundiales de Fórmula 1, sino también por su extraordinaria capacidad para estar en el equipo justo en el momento justo. ¿Suerte? Tal vez una vez, pero cinco no.

Carlos Reutemann, por su parte, supo elegir escuderías de prestigio, pero no siempre coincidió con sus momentos de gloria. Ferrari y Lotus, por ejemplo: dos equipos campeones, pero en uno desarrolló el auto que triunfaría al año siguiente, y en el otro llegó justo después de su época dorada.

Traigo esto a colación porque, en mi opinión, Franco Colapinto, quien muchos vemos como el heredero natural de Fangio y Reutemann, se encuentra hoy en el equipo equivocado en el momento equivocado.

En tiempos pasados, los pilotos negociaban directamente con las escuderías. Hoy, detrás de cada volante hay un entramado de representantes, asesores y estructuras que toman decisiones estratégicas. Y esas decisiones, en el caso de Colapinto, parecen haberlo llevado a un entorno poco propicio para su desarrollo.

¿Por qué Alpine?

La historia reciente del equipo lo dice todo. Desde 2023, Alpine ha cambiado cuatro jefes de equipo y ha perdido a figuras técnicas clave como Alan Permane, Bob Bell y Pat Fry. Todos ellos formaban parte del histórico Team Enstone (nombre que sobrevive a sus múltiples transformaciones: Benetton, Renault, Lotus y ahora Alpine) y fueron pilares desde los años ’90. Hoy, Permane lidera Racing Bulls, Bell asesora a Aston Martin y Fry trabaja en Williams.

Además, era sabido que Luca de Meo, CEO del Grupo Renault, tenía la intención (y la necesidad) de desprenderse del equipo de F1. Renault atraviesa dificultades financieras y el equipo Alpine, valorado en al menos mil millones de dólares, representa una oportunidad de liquidez. A esto se suma el giro estratégico de Alpine hacia la fabricación exclusiva de vehículos eléctricos, lo que hace que la presencia en Fórmula 1 sea, como mínimo, prescindible.

Se dice en el paddock que De Meo convocó a Flavio Briatore para mejorar el rendimiento del equipo y facilitar su venta. Su primera decisión fue abandonar el motor Renault en favor de Mercedes, justo cuando se avecina un cambio reglamentario y Renault ya tenía su unidad de potencia 2026 en fase de pruebas. Una decisión cuestionable desde lo técnico, pero comprensible si el objetivo es maximizar el valor de venta.

Hoy, con De Meo fuera de escena, el futuro del equipo es incierto. No se sabe si el próximo CEO mantendrá la misma política ni si Briatore continuará en su cargo. Esta inestabilidad, que se refleja también en el rendimiento del coche, dificulta la motivación interna y genera una fuga de talento hacia estructuras más sólidas y competitivas.

Flavio Briatore junto a Luca De Meo.
Flavio Briatore junto a Luca De Meo.
¿Y Colapinto?

Para un piloto joven como Franco, en su segunda media temporada en Fórmula 1, este contexto es el peor escenario posible. La falta de dirección, el desorden técnico y la ausencia de un entorno que lo proteja y lo guíe son obstáculos que ningún talento debería enfrentar a los 22 años. El contraste con Williams, equipo que le dio la oportunidad de brillar el año pasado, es evidente.

La falta de prestaciones del auto no es la causa, sino la consecuencia del desequilibrio general del equipo. El coche presenta una tendencia al sobreviraje en la entrada de curvas que supera lo habitual, lo que genera desconfianza en el piloto, obliga a frenar antes y compromete el ritmo. Eso es lo que le ocurre a Colapinto: no confía en el auto, y nadie se lo pone a punto para que pueda hacerlo.

En Hungría, por un momento, el coche respondió y Franco demostró que no ha perdido su talento. Pero en carrera, la estrategia fue errónea y las paradas en boxes, desastrosas, con la misma rueda trabada en cada ingreso. Para completar una serie de ocho carreras que no le permitieron lucirse, en las pruebas de neumáticos posteriores al GP de Hungría sufrió un accidente que pudo haber tenido consecuencias graves.

¿Qué futuro le espera?

El futuro de Franco Colapinto en la Fórmula 1 es incierto. La categoría reina es implacable y no perdona. Por eso, al llegar, es fundamental hacerlo en un equipo estable, que brinde confianza y permita crecer. Mi mayor deseo, y sin duda el de todos sus seguidores en Argentina, es que pueda cerrar esta temporada con algún resultado positivo, y que el próximo año tenga una nueva oportunidad para demostrar que es un piloto de gran talento y velocidad.

5 respuestas

  1. Colapinto debería consultar con sus patrocinantes y abandonar Alpine lo antes posible, antes que sea tarde, Sainz sabia esto por eso no firmo para Alpine, lamente mucho el dia que se fue de Williams, debería haber esperado una butaca en ese equipo

  2. Deseo que pueda lograr terminar esta temporada decentemente y a cruzar los dedos para el año que viene! pero no esta nada facil!

  3. Excelente nota de un grande como Rinland, que sabe de lo que habla.Hoy, como muchos también pienso lástima que no se quedó de reserva, pero por otro lado ,en la F1 hay que estar , si no miremos a Drúgovich.Mi esperanza y deseo ,es que este paso por » el infierno» lo fortalezca aún más , y los Jefes vean sus méritos con este Alpine abandonado a su suerte.

  4. Quien hizo esta nota? Hay muchas mentiras escritas acá. Porque mejor no averiguan y hacen un buen trabajo periodistico en vez de escribir pavadas.

  5. Es la mejor opción, está corriendo y tomando experiencia (en Williams estaría de reserva por el 25 y el 26)
    En el 26 Alpina dará un salto para estar a mitad de tabla igual que Williams.

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